jueves, 10 de enero de 2008

TRÍADA ... OH PÍNDARO

ALMANAQUE

Un vulgar almanaque
y el lugar
de donde ya no podemos regresar.
Amor,
lucha,
felicidad,
disgustos,
hijos pensados,
soñados,
esperados.
Dos luchadores
en la arena
de la vida,
vida maliciosa,
vida infecta.
Soñar en demasía, exigir cabales

ocasiones.
Nos queda,
troyanos vencedores el placer infinito del amor.
Soñar, aún en disenso en inquebrantable dualidad.


BUSCAR

Infructuoso. Inagotable.
Buscar.
Encontrar el sino oculto.
¿Por qué esa búsqueda?
Hallar esa convergencia,
el punto exacto del fugaz momento
en que se funden
el amor y su atormentado intento.
Saber que te amo y tú lo mismo.
Comprender que es amor
y acceder al recóndito, diminuto
éxtasis en que se encuentran las miradas.
Pensar.
De tu mano viene
la fuerza de vivir en este mundo
lleno de esperanzas muertas
y...revivir.

Busco a QUÉ

QUÉ. No dejaste
que sus ojos se encontraran con los míos
por última vez

QUÉ. Evitaste el postrer roce
de nuestras manos

QUÉ. ¿dónde estás, QUÉ?
QUÉ. ¿QUÉ eres?

Interpuesto entre su vida
y la mía

Te buscaré, QUÉ.